29 noviembre 2006

Conseguir la paz


Meses después del comienzo del llamado proceso de paz la situación atraviesa un momento crítico. Lo cierto es que la disposición mostrada por el gobierno para conseguir una paz definitiva en Euskadi está siendo insuficiente, porque desgraciadamente no sólo se trata de buena voluntad.
Bajo mi punto de vista hay una seria de condiciones necesarias para llevar a buen puerto este proceso.

  1. Que los terroristas abandonen cualquier acto de violencia y muestren su disposición a desarmarse. Aunque ya hace más de dos años que no hay víctimas mortales provocadas por el terrorismo, aunque llevamos meses de tregua indefinida, la violencia callejera sigue siendo habitual en las calles de la País Vasco y no sólo no ha comenzado el desarme sino que se sabe que ETA sigue incrementando su arsenal. Por otro lado el brazo político de ETA, ,actualmente ilegalizado, se muestra reacio a cumplir las condiciones necesarias para volver a ser legal. Entre ellas, la que más parece costarles es la de rechazar públicamente la violencia.
  2. Consenso de todas las fuerzas políticas democráticas. Aquí la cosa está fatal. Parece claro que sin en apoyo del PP que representa el voto de más de diez millones de personas no se va a ningún sitio. Pero PP no está dispuesto a apoyar. En la tregua anterior se sabe que los populares intentaron acabar con el terrorismo con métodos muy parecidos. ¿Por qué ahora desde la oposición no apoyan? Quiero creer que no hay fines electorales y que la extraña estrategia política que siguen de oponerse a todo no influye en esto. Hay que reconocerles que después de su fallido intento de paz, la política antiterrorista fue la más efectiva de toda la democracia (aunque ahí si contaron con el apoyo incondicional del PSOE) y que un posible fracaso podría suponer un gran paso atrás ya que podemos suponer que a ETA le resulta más fácil, rearmarse y reorganizarse en un periodo como este y ese miedo del PP es lógico. Pero ¿merece la pena ese riesgo cuando hablamos de conseguir la paz definitiva? Por otro lado lo que no me parece justo es que el PP hable de proceso de rendición cuando sabe que eso no es verdad. El PSOE siempre ha dicho que en la negociación nunca se saldrá de los márgenes de la legalidad y que no habrá concesiones políticas ni territoriales.
  3. Apoyo de las víctimas. Politizadas o no , las víctimas son un agente determinante en este proceso. Y no lo apoyan. Y es comprensible que no lo hagan. Mientras el gobierno negocia con sus verdugos o los de sus familiares , estos siguen sin mostrar ni la más mínima señal de arrepentimiento.
  4. Unión de la sociedad contra el terrorismo. Parece claro que actualmente no existe. El alejamiento de las posturas de los principales partidos políticos es la causa principal pero hay otros factores. Por ejemplo el nefasto comportamiento de la mayoría de los medios de comunicación que con su capacidad para influir y crear opinión pública se han convertido en auténticos ultras que no miran más allá de los intereses empresariales del medio de comunicación para el que trabajan . Y esa desunión se ve en la calle y desgraciadamente lejos han quedado esas manifestaciones contra el terrorismo en los que la unión del pueblo ponía contra las cuerdas al terrorismo.


Os cuento una historia que no va a ocurrir:

Zapatero y Rajoy deciden reunirse para hablar del proceso. Van a darse otra oportunidad para encauzar sus diferencias. Zapatero le pone al día al líder popular del estado de la negociación. Ambos alcanzan un acuerdo y se forma un nuevo pacto antiterrorista. Deciden dar un ultimátum a ETA. Ni un robo más de armas y descenso de la violencia callejera. Batasuna decide entra en el juego democrático. Se vuelven a reunir miembros del PP, del PSOE, del PNV y de Batasuna. Se nombrará una comisión en la que habrá miembros de estos partidos políticos y de asociaciones de víctimas del terrorismo dedicada a realizar propuestas y a valorar los posibles acuerdos. Se producirá un acercamiento paulatino de presos a cárceles vascas. Reducción de las penas de todos aquellos etarras que muestren arrepentimiento. ¿Y Navarra? Se plantea la posibilidad de realizar allí un referéndum . Si 2/3 de los navarros votan a favor se anexionan a Euskadi. El proceso dura 5 años .ETA se desarma definitivamente. Casualmente en ese momento es Mariano Rajoy el presidente del gobierno, pero también salen en la foto Zapatero, Alcaraz e Ibarretxe. Lo han conseguido. Por cierto Navarra decide seguir teniendo una autonomía propia.

24 noviembre 2006

Infancia

El pasado lunes 20 de noviembre se celebró el Día Universal de la Infancia. Segun datos recogidos datos recogidos en la web de Aldeas Infantiles
-149 millones de niños están desnutridos (1 niño muere en el mundo cada 7 segundos por hambre).
-11 millones mueren por causas evitables.
-100 millones no van a la escuela debido a la pobreza, la discriminación o falta de recursos.
-1,4 millones de niños menores de 15 años tiene SIDA (4,3 millones han muerto por esta enfermedad y 13 millones son huérfanos por ello).
-250 millones, entre 4 y 5 años, son explotados laboralmente (en España hay 170.000 que trabajan).
-300.000 luchan activamente en conflictos armados.
-2 millones murieron entre 1990 y 2000 por conflictos armados, 6 millones sufrieron heridas o quedaron impedidos, 12 perdieron su hogar y más de un millón son huérfanos de guerra.

En su libro Ébano , el periodista polaco Ryszard Kapuscinski, a través de su experiencia como corresponsal en Africa, hace un impresionante retrato de este continente. De él extraigo el siguiente fragmento que nos muestra la situación que muchos niños viven allí.

Niños solos y abandonados van allí donde se estacionan las tropas, donde hay cuarteles, campamentos o etapas. A fuerza de ayudar y trabajar, acaban formando parte del ejército: son "hijos del regimiento". Reciben un arma y no tardan en pasar por el bautismo del fuego. Sus colegas mayores (¡también niños!) a menudo se muestran perezosos, y cuando hay una batalla con el enemigo a la vista, mandan a los pequeños al frente, a la primera línea de fuego. Estas escaramuzas armadas de la chiquillería resultan especialmente encarnizadas y sangrientas, porque el niño carece del instinto de conservación, no siente ni comprende el horror de la muerte, desconoce el miedo que sólo la madurez le hará conocer.
Las guerras de niños se han hecho posibles también gracias al desarrollo tecnológico. Hoy las armas de repetición de mano son ligeras y cortas; sus nuevas generaciones se asemejan cada vez más a juguetes infantiles. El viejo máuser era demasiado grande, pesado y largo para un crío. El niño pequeño tenía el brazo demasiado corto para llegar al gatillo sin esfuerzo y, también, el punto de mira resultaba excesivamente lejano para su ojo. Las armas modernas, al eliminar tales inconvenientes, solucionan estos problemas. Su tamaño se ajusta tan perfectamente a la silueta de un niño que más bien causan un efecto infantil y gracioso en manos de un soldado alto y fornido.
El hecho de que el niño sólo sea capaz de usar armas de mano, de alcance corto (pues no sabe dirigir el fuego de una batería de artillería ni tampoco pilotar un bombardero), ha hecho que los combates en las guerras de los niños adquieran la forma de un choque directo, de un contacto físico, casi de un cuerpo a cuerpo: los pequeños se disparan a quemarropa, hallándose a un paso los unos de los otros. Los efectos de estos duelos suelen ser aterradores, pues no sólo mueren los que caen fulminados en el campo de batalla. Dadas las condiciones en que se desarrollan aquellas guerras, también pronto acaban muriendo los heridos: de hemorragias, de infecciones y por falta de medicinas.


Ebano, recomendación de mi amigo marbellí Carlos Javier, se ha convertido en uno de mis libros favoritos.

03 noviembre 2006

Abuelito

Era un hombre menudo, de cabeza más bien grande, con gafas y poco pelo. No era guapo y tenía muy mal genio. Así era mi abuelo, pero ante todo era un buen hombre.

Tengo varias imágenes de él en mi memoria. Le recuerdo, por ejemplo montado en su bici con una pinza en los pantalones. Solía venir de la distribuidora Mansilla y traía los periódicos para el quiosco que tenía con mi abuela. También le recuerdo en el sótano de la casa con una bata azul. Allí podía estar poniendo los precios a los cuadernos y bolígrafos o encendiendo la calefacción o cociendo los chochos. Otra imagen que permanece en mi memoria es la de algún paseo por el parque con su gorra y un abrigo de ante marrón.

Creo que me veía vulnerable porque siempre me prestó su atención. Estaba empeñado en que escribiese bien y en que dominará los cálculos y cuando llegaba del colegio me estaba esperando con un cuaderno de caligrafía y otro de problemas matemáticos. A veces me llamaba para que viese con él en la televisión reportajes sobre cosas tan diferentes como la importancia que tendría en el futuro la informática o como lavarse correctamente los dientes. Todo aquello que entonces me parecía un incordio, lo veo hoy como un reflejo de su amor y preocupación por mi.

Tenía un fuerte carácter pero detrás había una persona sensible que se emocionaba con frecuencia. Toda su familia recordamos aquella noche de Navidad en la que le vimos reír a carcajadas cuando sus nietos cantábamos a coro la canción Guantanamera. Y yo me guardo otro momento mágico: el abrazo emocionado que nos dimos mi padre, él y yo cuando España marcó el decimosegundo gol en el histórico partido contra Malta.

Sus últimos años fueron un continuo empeoramiento. Alzheimer, anginas de pecho, tumores y por si fuera poco un accidente de tráfico. Pero nunca dejó de mirar al futuro. Su última gran ilusión fue el piso que se compraron mi abuela y él . En este piso pasó la recta final de su vida.

Nunca olvidaré la última vez que lo ví. Le quedaban pocas horas, aunque en realidad ya hacía tiempo que nos había dejado. Ya no podía ni ver, ni oír, ni hablar. Respiraba con dificultad. Allí postrado en aquella cama se despedía de la vida.

Hoy hace quince años de su muerte. No me olvido de ti abuelito.